Domingo 29 de septiembre de 2019

Aún no me lo puedo creer

Me he levantado hace una hora, tras abrir los ojos de nuevo veo que no estas a mi lado, ni te levantas para poner una lavadora y volver a la cama para estar conmigo un rato más, jugando y riéndonos, hablando de lo que haremos hoy, comer en casa, comer fuera, limpieza, salir a pasear, ir al gym, no se ha producido nada de lo habitual, de lo deseado, de lo que necesito.

Las mañanas de domingo siempre nos han encantado, dejarnos llevar por la pereza, no tener ninguna prisa, amarnos…

Hoy echo de menos todo eso, pero sobre todo te echo de menos a ti, tu presencia siempre ha sido balsámica, nunca ha importado donde estuviese yo o donde estuvieras tú, al final del día siempre te encontraba en casa esperándome, ofreciéndome tu maravillosa sonrisa, acogiéndome en tus cálidos brazos.

Cuando no podía esperar a volver para sentirte bastaba una simple llamada por tfno. dos palabras sin mucho sentido, un «te echo de menos cariño» y tu reconfortante respuesta «ya mismo estás aquí» o «yo también, vente ya para casa», eran suficientes hasta el reencuentro.

Me he despertado y no estás, ni puedo llamarte, ni puedes darme el consuelo al que me acostumbraste.

No puedo verte, no puedo acariciarte, abrazarte, besarte, amarte…

¿Acaso puede haber vida sin todo esto?

No puedo creer que no estés, que no pueda volver a oírte y tocarte.

¿Cómo continuar con una carencia tan vital? 

Es inhumano, es sobrenatural, es insoportable!!

Cada paso que doy, cada gesto que hago, cada mirada que fijo están cargadas de dolor y añoranza, han sido tantos años en los que cada movimiento estaba acompañado por ti, que cada acto cotidiano me recuerda a ti y representa la perdida de lo mas preciado, el valor y objetivo de toda existencia.

Sigo aquí, mientras escribo, esperando verte salir de la cocina o el salón, oir tu voz llamándome «PAPI» y no puedo creer que no volverá a suceder.

Irracionalmente me niego a creerlo o aceptarlo. ¿Cómo alinear corazón y mente? ¿Cómo hacer que convivan con las mismas convicciones y objetivos?, cada uno tiene un credo, cada uno alimenta distintas necesidades, cada uno existe al margen del otro.

Entonces ¿como vivir partido, escindido, dividido, como vivir siendo agua y aceite?

¿Quién tomará el control? ¿el cerebro? dando racionalidad a todo, eliminando lo inútil, centrándose en lo inmediato, en lo posible, en la consecución de objetivos

O el corazón, viviendo en el dolor, la añoranza, el tormento y la pena, sin objetivos, sin responsabilidades, sin prioridades, sólo dejándome llevar por las emociones y los sentimientos.

Es difícil compatibilizar, hay que ordenar el dia y otorgar el mando alternativamente, intentando que no haya enfrentamientos, que la alternancia se adapte a las circunstancias, cerebro=publico, corazón=intimidad.

Que buen razonamiento y que imposible de poner en práctica, por que hay miles de disparadores, de catalizadores, que traen al frente al corazón y toma el control sin resistencia.

De nuevo estoy divagando amor mío, contigo podía hablar estas tonterías, me dejabas que te aburriese con mis monólogos. Ahora sobre este cuaderno y esta pluma recaerá esta función.

Tengo que seguir con mis tareas.

Te sigo Viendo, pero te hablaré de nuevo mas tarde.

TE AMO MI NIÑA, MI PRINCESA MI AMOR.

Acabo de tender la ropa roto y desbordado, llorando y moqueando como un bebe llamando a su madre, no puedo seguir viviendo estas continuas dosis masivas de dolor, me matan en vida, pero no acaban con el sufrimiento, aun así lo prefiero mil veces a la indolencia.

 

 

 

47 Visitas totales
33 Visitantes únicos
Total Page Visits: 139 - Today Page Visits: 1

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *